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Huella ecológica, un indicador de sostenibilidad

¿Qué es la huella ecológica?

La definición que da el Gobierno de España sobre la huella ecológica es: “Indicador de sostenibilidad que trata de medir el impacto que nuestro modo de vida tiene sobre el entorno.”

Todos tomamos decisiones en nuestro día a día que influyen en el planeta, tienen un impacto sobre el medioambiente. Este impacto es la cantidad de terreno biológicamente productivo que necesita cada persona para producir los recursos que le mantienen cada día. Estos recursos son diferentes dependiendo de las personas y del estilo de vida que lleva cada una de ellas.

Todas las fases de producción en las que se encuentra el ser humano tienen presente el concepto de huella ecológica. En la actualidad el ser humano consume más recursos y produce más residuos que la biocapacidad del planeta tiene de asimilarlos.

Tipos de huellas ecológicas

  1. La huella de suelo: refleja la cantidad de terreno que hace falta para producir una materia prima.
  2. La huella híbrida: indica el agua dulce que se utiliza para producir los bienes y servicios que consumimos
  3. La huella de carbono: indica las emisiones de gases de efecto invernadero que produce el ser humano al fabricar un producto o realizar sus actividades diarias.
  4. La huella de materiales: mide la cantidad de materias primas necesarias para fabricar algún producto o realizar alguna acción

¿Cómo podemos reducir la huella ecológica?

Para reducir la huella ecológica, el ser humano debe fijarse en todos los ámbitos de su vida cotidiana. Para ello necesitará llevar a cabo alguno de los siguientes consejos:

  • Usar un transporte limpio y sostenible: en la medida de lo posible utiliza el transporte público, circular en bicicleta, patinete o caminando.
  • Ser eficiente en el hogar: reduce el consumo de aparatos eléctricos y calefacción. Ayudaremos a reducir la huella ecológica y también a reducir las facturas del hogar.
  • Reducir la huella ecológica de los alimentos: consumir productos locales, reducir el consumo de carne y comprar productos a granel ayuda a reducir la huella ecológica.
  • Reducir el consumo de agua: tomar una ducha en lugar de un baño, cerrar el grifo cuando no lo necesitemos, si tenemos algún grifo que gotea, arreglarlo, etc.
  • Reducir los residuos y reciclarlos: comprar productos más duraderos, evitar el “usar y tirar”, comprar productos con menos embalaje… y una vez utilizados, reciclar en el contenedor adecuado.

Consecuencias de la huella ecológica

Todo lo comentado anteriormente acarrea diferentes consecuencias en nuestros entorno y en cómo el planeta va cambiando con el paso del ser humano:

  • Aumento del ritmo del cambio climático
  • Agotamiento de los recursos naturales
  • Erosión del suelo
  • Sobreexplotación de los recursos agrícolas y pesqueros
  • Pérdida de biodiversidad
  • Desequilibrio ecológico
  • Deforestación
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